Juan Carlos Arroyo estaba desaparecido desde el 28 de octubre de 1976. Era oriundo de la ciudad de San Pedro de Jujuy. Era obrero, trabajador independiente. Cuando fue detenido tenía 33 años.
Su cuerpo fue recuperado e identificado por el Equipo de Antropología Forense (EAAF). Había sido enterrado en una fosa común, en febrero de 1977, en el cementerio de Avellaneda, Provincia de Buenos Aires
Sus restos arribaron a Jujuy el jueves 6 de agosto y serán velados por sus familiares en la sede de ATE para ser sepultados en el cementerio de la ciudad de Palpalá el Sábado 8 a las 16:30 hs.
Su cuerpo fue recuperado e identificado por el Equipo de Antropología Forense (EAAF). Había sido enterrado en una fosa común, en febrero de 1977, en el cementerio de Avellaneda, Provincia de Buenos Aires
Sus restos arribaron a Jujuy el jueves 6 de agosto y serán velados por sus familiares en la sede de ATE para ser sepultados en el cementerio de la ciudad de Palpalá el Sábado 8 a las 16:30 hs.
Su historia
Juan Carlos Arroyo, “El Negro”, nació el 10 de julio de 1943. El “Negro”, en 1965 se incorporó al Movimiento Revolucionario 17 de Octubre (MR-17). En el año 1968 trabajó en la Proveeduría de Altos Hornos Zapla. En abril de ese mismo año, nacieron sus dos primeras hijas: María Eva y Sofía y, en junio de 1976, nació la pequeña Marina.
Su activa militancia estuvo signada por persecuciones permanentes: sufrió la primera detención, por razones políticas, en mayo de 1970. Ese mismo año el “Negro” se desvinculó de sus contactos en Buenos Aires y se incorporó al FRP.
Fue recapturado en enero de 1972 y trasladado al Penal de máxima seguridad de Chaco; de allí, al de Devoto y, por último, al de Rawson, de donde salió en libertad con la Amnistía de Cámpora, en mayo de 1973 y regresó a Jujuy.
Fue designado Director del Archivo Histórico de la Provincia hasta enero de 1974, función que debió abandonar a consecuencia de su opción política. En febrero de ese año, la Policía Federal realizó el primer intento de secuestro por lo que debió entrar en la clandestinidad y radicarse en Buenos Aires.
Entre 1975 y 1976, el MR-17, que fundara Rearte, y el FRP se fusionaron para formar al Frente Revolucionario 17 de Octubre (FR-17). El “Negro” fue miembro de la conducción de esta organización. El “Negro” siguió siendo peronista hasta el fin de sus días. Ese era su sentir, su identidad más profunda
La madrugada del 28 de octubre de 1976, el "Negro" Arroyo fue secuestrado en la localidad de Moreno, Provincia de Buenos Aires junto a sus compañeras Gladis del Valle Porcel, quien estaba embarazada, y Marta Taboada, por una patota de fuerzas conjuntas. Fueron recluidos en el CCD (Centro Clandestino de Detención) Proto Banco, que funcionaba en la cabellaría de la Brigada Güemes, perteneciente a la Policía de la Provincia de Buenos Aires. Fue visto por última vez en febrero de 1977, cuando lo sacaron, junto al dirigente Dipascuale, para asesinarlo.
De “Hechosnet.com” de San Pedro de Jujuy
Cuando recordamos a la militancia peronista de los tiempos crueles, de inmediato surge el nombre de Juan Carlos Arroyo (El “Negro” Arroyo), peronista luchador por la causa nacional y popular.
Los militantes como el Negro Arroyo son los que mantuvieron altas las bandera legadas por Perón y Evita, con enorme esfuerzo y habiendo rendido hasta la vida en la batalla.
A esta clase de soldados de la causa nacional y popular no los detienen los represores, los torturadores ni los matadores. Mucho menos los difamadores que siempre se han ocupado y se ocupan de perseguirnos.
El negro fue un rebelde contra la injusticia social y la entrega del país y como es natural, los enemigos solo tenía un modo de acallarlo: La Muerte Física.
Pero también aquí fallaron. Muchos negros Arroyo siguen por la ruta de la liberación, y aunque algunos enemigos se creen ganadores, fatalmente la militancia les ganará la Guerra.
Juan Carlos Arroyo, “El Negro”, nació el 10 de julio de 1943. El “Negro”, en 1965 se incorporó al Movimiento Revolucionario 17 de Octubre (MR-17). En el año 1968 trabajó en la Proveeduría de Altos Hornos Zapla. En abril de ese mismo año, nacieron sus dos primeras hijas: María Eva y Sofía y, en junio de 1976, nació la pequeña Marina.
Su activa militancia estuvo signada por persecuciones permanentes: sufrió la primera detención, por razones políticas, en mayo de 1970. Ese mismo año el “Negro” se desvinculó de sus contactos en Buenos Aires y se incorporó al FRP.
Fue recapturado en enero de 1972 y trasladado al Penal de máxima seguridad de Chaco; de allí, al de Devoto y, por último, al de Rawson, de donde salió en libertad con la Amnistía de Cámpora, en mayo de 1973 y regresó a Jujuy.
Fue designado Director del Archivo Histórico de la Provincia hasta enero de 1974, función que debió abandonar a consecuencia de su opción política. En febrero de ese año, la Policía Federal realizó el primer intento de secuestro por lo que debió entrar en la clandestinidad y radicarse en Buenos Aires.
Entre 1975 y 1976, el MR-17, que fundara Rearte, y el FRP se fusionaron para formar al Frente Revolucionario 17 de Octubre (FR-17). El “Negro” fue miembro de la conducción de esta organización. El “Negro” siguió siendo peronista hasta el fin de sus días. Ese era su sentir, su identidad más profunda
La madrugada del 28 de octubre de 1976, el "Negro" Arroyo fue secuestrado en la localidad de Moreno, Provincia de Buenos Aires junto a sus compañeras Gladis del Valle Porcel, quien estaba embarazada, y Marta Taboada, por una patota de fuerzas conjuntas. Fueron recluidos en el CCD (Centro Clandestino de Detención) Proto Banco, que funcionaba en la cabellaría de la Brigada Güemes, perteneciente a la Policía de la Provincia de Buenos Aires. Fue visto por última vez en febrero de 1977, cuando lo sacaron, junto al dirigente Dipascuale, para asesinarlo.
De “Hechosnet.com” de San Pedro de Jujuy
Cuando recordamos a la militancia peronista de los tiempos crueles, de inmediato surge el nombre de Juan Carlos Arroyo (El “Negro” Arroyo), peronista luchador por la causa nacional y popular.
Los militantes como el Negro Arroyo son los que mantuvieron altas las bandera legadas por Perón y Evita, con enorme esfuerzo y habiendo rendido hasta la vida en la batalla.
A esta clase de soldados de la causa nacional y popular no los detienen los represores, los torturadores ni los matadores. Mucho menos los difamadores que siempre se han ocupado y se ocupan de perseguirnos.
El negro fue un rebelde contra la injusticia social y la entrega del país y como es natural, los enemigos solo tenía un modo de acallarlo: La Muerte Física.
Pero también aquí fallaron. Muchos negros Arroyo siguen por la ruta de la liberación, y aunque algunos enemigos se creen ganadores, fatalmente la militancia les ganará la Guerra.
Querido Negro: vos ganaste tu guerra y parte de la guerra de todos. Por eso te estamos agradecidos a vos y a tu familia, que sufrió como la de todos los militantes las consecuencias de esta lucha justa.
Algún día llegaremos a la Victoria Final, y en ese camino estará JUAN CARLOS ARROYO, Peronista, Militante y Digno Portador de las Banderas de Perón y Evita.
Algún día llegaremos a la Victoria Final, y en ese camino estará JUAN CARLOS ARROYO, Peronista, Militante y Digno Portador de las Banderas de Perón y Evita.
Hugo Maldonado
de la Agrupación Identidad Peronista Jujuy
para Peronismo 26 de Julio
de la Agrupación Identidad Peronista Jujuy
para Peronismo 26 de Julio
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